lunes, 1 de octubre de 2012

Capítulo 33: Historia de un bailarín

Ginyu nació en el planeta que acabaría convirtiéndose en el Planeta Freezer nº 18. De pequeño había sufrido las constantes burlas de sus compañeros de clase. Y sus padres y hermanos, por más que él trataba de explicarle lo que le hacían, simplemente no le hacían caso o se reían de él por ser tan quejica. Un día, mientras huía llorando de sus compañeros, se metió dentro de un callejón. Ahí encontró una puerta llena de luces. Entró ahí por dos razones. Una, porque quería meter la mayor distancia entre los matones y él. La otra, que las luces le hacían un efecto atrayente. Al entrar se encontró dentro de una sala de teatro. La sala tenía espació como para unas 60 personas, pero solo había una docena de personas, más de la mitad dormidas. En el escenario había diez personas bailando. Ginyu se quedó maravillado. No lo sabía, pero aquél encuentro le cambió la vida. 

- Chico, tienes que irte- dijo uno de los actores. La función ya hacía diez minutos que había terminado y todos los que habían pagado para verla se habían marchado rápidamente a su casa enfadados por haber tirado el dinero.- ¿Chico?

- Eh… Sí, lo siento, me voy- dijo Ginyu. Esa experiencia le había cambiado la vida. Esos bailes cautivadores le habían maravillado. 

A partir de ese día Ginyu iba cada tarde a ver la función. Al cabo de dos semanas se sabía completamente toda la coreografía. Sus padres ni se preguntaban dónde iba cada tarde, pero no les importaba lo más mínimo. Un día, los matones de turno entraron en el baño mientras Ginyu estaba repitiendo las posturas que había visto el día anterior. Ginyu se las ingenió para huir del colegio antes de que los otros lo atraparan. Cómo no sabía dónde ir, se dirigió hacia el teatro. Ahí se encontró que la compañía estaba en medio de un ensayo. Todos los actores se giraron hacia a él al oír cómo se abría y cerraba la puerta. 

- Yo a ti te conozco-dijo uno de ellos- tú eres el que viene cada noche, ¿no?

- Sí…-dijo Ginyu un poco avergonzado

Pero lo que Ginyu no esperaba fue lo que pasó. A partir de ese momento Ginyu formó parte de la compañía. Cada día iba ahí y los actores le enseñaban todo lo que sabían sobre su baile. Y también le enseñaron el secreto más preciado de la compañía. El cambio de cuerpo. La leyenda contaba que hacía siglos algunos los habitantes del planeta poseían esa habilidad. Pero desde que la actual familia real ganó el poder y prohibió tal técnica todos los que la poseían fueron perseguidos y eliminados. Pero algunos de ellos siguieron con vida. Dentro de estos había dos grupos, los que aceptaron la norma y no enseñaron la técnica a sus descendientes o la practicaban en secreto. Ginyu y su familia eran descendientes del primer grupo, aunque ellos no lo sabían. Un día, Ginyu se dirigía hacía el teatro cuando se encontró la entrada bloqueada por unos policías. Ginyu se dirigió hacía la entrada trasera y entró en el teatro. Al llegar al escenario se encontró con todos sus amigos estirados en el suelo, gravemente heridos. 

- Ginyu…-dijo uno de los moribundos.- huye… si saben que te enseñamos el cambio de cuerpo te matarán… tienes… que sobrevivir… que no pare el baile…

Desde ese momento Ginyu trabajo duro para poner fin a la monarquía. Intercambió su cuerpo con uno de los reclutas del ejército y con ese cuerpo aprendió el arte te la lucha. Un día, llegó una nave a la capital. El emperador Freezer pidió una audiencia con el rey del planeta. Ginyu era uno de los guardaespaldas del rey. La petición de Freezer era sencilla. A partir de ahora el planeta se anexionaría al grupo de planetas de Freezer y se aboliría completamente la forma de gobierno actual. El monarca rápidamente se negó y ordenó a sus guardas que eliminaran a Freezer. Freezer de un plumazo mató a todos los que dieron un paso adelante. Acto seguido decapitó al líder. Cogió una especie de cámara y la apunto en su dirección. Todas las pantallas del planeta 

- Hola a todos. Soy vuestro nuevo líder supremo Freezer. Estoy aburrido de repetir siempre lo mismo, así que iré al grano. Vuestras vidas me importan una mier**. Los más poderosos que me encuentre pasaran a formar parte de mi gran ejército. Los demás tendrán dos opciones. O se convierten en los esclavos de los compradores de este planeta o mi ejercito se encargará de eliminarles. 

El efecto fue inmediato. Mucha gente del pueblo se reunió en forma de protesta formando grandes manifestaciones. Freezer señaló hacía Ginyu y los demás miembros de la guarda del rey.

- Vosotros sois los más fuertes de por aquí. Quiero comprobar vuestra lealtad. Matadles a todos. 

- Sí señor-dijo Ginyu. Ese hombre había derrotado en un segundo a los miembros de élite de la monarquía. Los mismos que habían matado a su compañía. Se sentía en deuda con él. 

Ginyu se abalanzó a la ventana y saltó. Al cabo de cinco minutos la plaza era un mar de cadáveres. A partir de ese momento, Ginyu pasó a formar parte del ejercito de Freezer. Cada vez que iba a un planeta con seres más poderosos se intercambiaba de cuerpo con los habitantes. Así iba ascendiendo. Al cabo de unos años finalmente Freezer le permitió crear su propio grupo de élite. El único requisito que Ginyu pedía para entrar era que los integrantes supieran bailar con estilo. Y así fue la formación de las Fuerzas Especiales.

Y ahora… Ginyu estaba en sus últimas. La mitad de su cuerpo no le respondía. La técnica de Gohan le había hecho terminar el baile. Ginyu, con un último esfuerzo miró hacia arriba. “Chicos… El baile terminó…”. En el cielo se alzaba una luna llena. Puede que no fuera el fin del baile después de todo.


Capítulo 32: Esperanza

- Dejadme ir…-dijo el chico que estaba estirado en la cama.

- No puedes- dijo la mujer pelirroja- todavía no estás completo

- Pero están en peligro… Necesitan mi ayuda…

- Pero si sólo tienes el prototipo de brazo… No aguantará más que dos rayos de Ki-dijo la chica de pelo azul.

- Con eso... suficiente… Dejadme…

- Pero…


En la otra parte del mundo, una inmensa extensión de polvo inundaba el bosque. Ginyu se giró en dirección a Goten y Trunks.

- Bueno, una menos. Ahora solo quedan dos. Y ni siquiera os podéis fusionar… Que decepción, que decepción…

- Te equivocas-dijo una voz detrás suyo- ¡quedamos 4!

- ¿Cómo?- Ginyu se giró. A contra sol, que estaba a punto de ponerse, no se veían bien de quien eran. Pero una de ellas desprendía una energía enorme- quien c*** sois.

- Somos los que van a encerrarte para siempre.

- ¡Gohan!-gritó Goten.

- Oh… Por fin apareces.

Gohan apareció rápidamente junto a los chicos. En brazos llevaba a una Pan inconsciente y la dejó reposando en el suelo. Kibitoshin se teletransportó a su lado.

- Shin, cúralos. Yo me encargo de Ginyu.


Pan abrió los ojos. Una sensación reconfortante le inundaba el cuerpo. Al incorporarse descubrió que estaba recuperada de sus heridas y que estaba llena de energía. Miro a los lados. Ahí estaban Goten y Trunks, ninguno de los dos con heridas.

- ¿Qué ha pasado?¿Y Ginyu?- le preguntó a su tío y a Trunks. Pan observó a sus alrededores y entonces lo vio. Una enorme esfera de Ki se alzaba ante sus ojos. Ahí dentro había dos siluetas. Una de ellas era su padre. La otra su hermano.- ¡Papá!

- ¡No Pan- gritó Gohan. Esa técnica requería mucha concentración y energía. Su abuelo le había dejado bien claro que la más mínima variación haría fallar la técnica- si vienes la técnica fallará!

- Pepero…

- Pan, haz caso a tu padre- dijo Kibitoshin

Ginyu estaba consternado. Había alguien que había conseguido contrarrestar su técnica. Empezaba a ver su “alma” saliendo de su cuerpo. Su superhipermegaultra técnica definitiva del cambio de cuerpo. Esa técnica que le permitió ascender en el ejército de Freezer… Los tiempos en que solo era un crío inútil habían pasado… Los recuerdos de esa oscura época le abordaban la mente que se escapaba de su cuerpo…


Capítulo 31: La tierra, desprotegida

Os preguntaréis que fue de Ginyu después de desaparecer de la casa de Suno y Hatchan. El extraterrestre fue corriendo diversos quilómetros y luego encontró una cueva donde se refugió. Ahí pasó unas horas de descanso a la espera de que pudiera moverse mejor. Al cabo de unas horas notó algo extraño. Primero una energía poderosa desapareció y acto seguido tres más. No sabía dónde habían ido Gohan y los demás, pero eso le dejaba vía libre para encargarse de los demás terrícolas. De repente se dio cuenta de algo. Con esas heridas no podría luchar contra Gohan y Gotenks. No estaba al 100%. Sin necesidad de ocultar su energía se dirigió hacia la torre sagrada.

Piccolo estaba preocupado. Una energía enorme se dirigía hacia ellos. Sin Gohan ni los demás las bolas de dragón se habían quedado desprotegidas, por lo que él, Yamcha, Ten y Chaoz se habían quedado defendiéndolas. Ginyu aterrizó delante de ellos.

- Veo que os habéis quedado cortos de guerreros, ¿no?- se burló Ginyu de ellos. Ni siquiera tenían a Buu para hacerle frente. ¿Dónde estaba el chicle ese?

- Te arrepentirás de lo que le hiciste a Krilin- dijo Yamcha.

- Tranquilos chicos. Sólo quiero saber dónde se ha ido el hijito de Goku. No me diréis que ha huido de mí- dijo Ginyu- oh, veo que aquí hay un par de Namekianos. Mala suerte para ellos. Estáis en mi lista negra. 

- No podrás con nosotros- dijo Piccolo- ¡ahora!
-
Los 4 guerreros saltaron hacia el capitán. Ginyu se los quitó encima de un puñetazo a cada uno. Ten preparó un Kikoho. Ginyu saltó hacía él y le golpeó con una fuerte patada en el cuello. Ten se desplomó en el suelo, muerto. Chaoz se acercó a Ginyu dispuesto a autodestruirse cómo había hecho con Nappa. Ginyu le cogió del brazo y le lanzó hacía la Tierra. Al tocar el suelo hizo una explosión que destruyó la base de la torre de Karin, haciéndola caer sobre todo el continente. Yamcha concentró toda su energía en un potente Kamehameha. Ginyu lo desvió y le lanzó una andada de Ki. Yamcha desvió algunos de los ataques destruyendo el Palacio, pero llegó un punto en que no pudo aguantar más y se calcinó por los ataques. 

- Bueno-dijo Ginyu a Piccolo- ahora solo quedamos nosotros. Contigo me divertiré un poco más.

Desde el palacio, Dende y Popo vieron, horrorizados, como Ginyu torturaba a Piccolo arrancándole uno a uno sus brazos y piernas y esperaba cómo se regeneraban para volverlos a arrancar. Finalmente Ginyu puso la mano sobre la cara del namekiano y le lanzó un rayo de ki. Ginyu se levantó. En un segundo apareció delante de Popo y Dende. De un golpe le rompió la espalda al mayordomo y lo dejó caer a la Tierra.

- Bueno. Necesito tu ayuda. Como ves mi cuerpo no está 100% curado y tú puedes curármelo. Así que, ¿qué me dices?
- Jamás te ayudaré. 

- Lo imaginaba.- Ginyu cogió a Dende y se lo llevó volando hacía la ciudad Satán. 


En la ciudad Satán se estaba celebrando una entrevista a Satán sobre el estreno de su nueva película, “Satan y Pampuc y el ataque del monstruo maldito”. Ginyu entró en el plató por el techo. Se aseguró que había una cámara apuntándole y cogió a Satán por el cuello y se lo partió.

- Hola queridos televidentes.-dijo Ginyu- cómo veis he derrotado a vuestro “héroe”. Lo que quiero es simple. Este hombre- dijo señalando a Dende- puede darme algo que quiero, pero no me lo quiere dar. Así que cada minuto destruiré una ciudad hasta que me lo dé.

La mayoría de personas que vieron el programa se pensaron que era una broma. ¿Un niño matando a Mr Satán? Pero de repente empezaron a ver cómo el niño iba volando de ciudad en ciudad (Ginyu cogió una cámara móvil para mostrarlo) destruyéndolas. Dende observaba, incapaz de hacer nada, cómo Ginyu iba destruyendo las ciudades y cómo la gente le odiaba más. La gente de la Tierra odiaba a su Dios. Dende sabía que si curaba a Ginyu él destruiría a todas las ciudades igualmente. Lo peor era que lo hacía de forma de que todas las víctimas sufriesen antes de morir. (Destruyendo presas inundando ciudades, golpeando al suelo para hacer terremotos que hacían caer edificios, cogiendo edificios y lanzándolos desde mucha altura…). Dende tomó una decisión.

- Para- dijo Dende.

- ¿Oh, ya te has decidido?- preguntó Ginyu

- Te curaré. Pero con una condición. No harás que los habitantes de la Tierra sufran. Si los eliminas hazlo de forma rápida. 

- Veo que te preocupan tus súbditos. De acuerdo, acepto el trato.

Dende curó a Ginyu. Por lo menos sabía que Ginyu jamás cogería las bolas de dragón. Una de ellas la había guardado en la sala dónde solo los dioses pueden entrar. Lo último que vio fue cómo Ginyu le tiró al suelo y cómo Ginyu envió un rayo de Ki sobre él destruyendo todo lo que se encontraba a menos de 10 Km a la redonda. 

Ginyu, ahora con el 100% de poder siguió destruyendo ciudades, esta vez siguiendo la última petición de Dende. Excepto en la Ciudad del Oeste, dónde la incendió completamente y entró dentro de la Capsule Corporation, cogió un scouter, una armadura de sayan y a Bulma, y lanzó a esta última dentro de un volcán. Sólo le faltaba uno.

Capítulo 30: Ataque conjunto

- Pan, quédate aquí cuidando de Trunks-dijo Goten- es muy peligroso luchar contra él

- Pepero…-se quejó Pan

- Haz caso a tu tío-dijo Trunks- si estuvieras ahí sólo estorbarías.

Goten saltó hacía Ginyu. Desde el Palacio Pan y Trunks observaban como Ginyu y Goten intercambiaban golpes a ritmo frenético. Aunque Goten manejaba la espada Z con mucha habilidad, Ginyu interceptada todas las estocadas que le hacía. Goten se alejó de Ginyu y empezó a acumular energía en su espada.

- ¡Ahora verás!-gritó Goten. Blandió la espada formando una Z en el aire. La espada envió unas ondas de energía cortante hacia Ginyu- ¡¡¡corte Z!!!

- Vaya… Que espadita más molona?-dijo Ginyu. Los cortes le dieron de pleno. El traje espacial de Ginyu quedó cortado formando una Z. En cambió el cuerpo sólo recibió unos pequeños cortes.- Pero veo que es tan inútil como vosotros.

- O no… Mi corte Z ha fallado…-dijo Goten. Ese ataque le había gastado gran parte de su energía. Goten decidió que era hora de mostrar su gran baza.- Pues entonces… ¡¡¡Tornado Z!!!

- Tío… No es tiempo para poner nombres ridículos a tus ataques-gritó Trunks- y menos con tan poco carisma… Si por ti fuera Gotenks sería un soso.

- Calla Trunks-dijo Pan- no es momento para eso. Goten está arriesgando su vida para…

En ese momento Ginyu, que había roto el tornado de Goten con una andada de Ki, cogió a su oponente por la pierna y lo lanzó hacia Trunks y Pan. Pan reaccionó a tiempo y pudo recoger a su tío en el aire.

- Chicos, deberíais atacarme a la vez-dijo Ginyu- a ver si por lo menos lográis darme. Aunque sin la fusión lo veo crudo. Debería haber dejado a ese niñato vivo. Así por lo menos podría divertirm…

Pan apareció detrás de Ginyu y le golpeó con un potente gancho en toda la mandíbula.

- ¡No te olvides de mí!- gritó Pan enrabiada. El estado de ssj2 estaba en su máximo poder.

- Oh sí- dijo Ginyu. Se reincorporó y le lanzó una bola de Ki-la niñita de papá.

- ¡¡No me subestimes!!-Pan lanzó un Kamehameha hacia la bola y se la devolvió a Ginyu

- Sabes-dijo Ginyu desviando la bola- tenía grandes expectativas contigo. Pero resultaste ser un fracaso total. Pero valió la pena esperar unos años más.

- ¡¡¡¡Maldito!!!!-Pan intercambió varios puñetazos con Ginyu.
De repente Goten se puso en medio del combate y golpeó a Ginyu. Pan se movió hacía la trayectoria de Ginyu y le volvió a golpear, enviándolo hacia Goten. Goten lo lanzó de nuevo hacia Pan.

- ¡Ahora! ¡Remátalo! –gritaron Goten y Trunks.

- ¡¡Ahora verás!!-dijo Pan, preparando su ataque final. Acumulo energía en su puño y se abalanzó para darle el puñetazo final a Ginyu. Se acercó más y más. Se preparó y…

Pan dudo durante un instante. Ése era su hermanito. No podía hacer eso. No podía hacer daño a su hermano.

Ginyu aprovechó ese instante para recuperarse y golpeó a Pan con todas sus fuerzas.

- Adiós niñita. Tranquila, ahora te reunirás con los demás.- Alzó su mano y creó una gran bola de energía y la lanzó hacía Pan.

- ¡Pan!¡No!-gritaron Goten y Trunks.


Capítulo 29: Encuentro de Gohans

- Uno dos, uno dos, uno dos,- de la casa salía ese sonido.

- Eoooo-dijo Gohan- ¿hay alguien aquí?

La brújula marcaba que la persona que buscaba estaba dentro de esa casa. Era curioso. Los alrededores de la casa le recordaban enormemente a los de su casa. Nadie respondía, así que entro en la casa. Pasó por la cocina y se encontró un enorme bol de arroz. Gohan aprovechó para comer, ya que llevaba horas volando en busca de su abuelo. Después de eso siguió buscando por la casa. Finalmente llegó al salón. Ahí había un hombre viejo mirando la tele a menos de cinco centímetros de la pantalla. 

- Perdón, ¿es usted Gohan?- dijo Gohan.

- Eh, ¿quién me llama?-respondió el abuelo

- Me llamó Gohan y soy el hijo de Goku, tu nieto

- ¿Cómo?¿De Goku?

Gohan le resumió las aventuras que su padre vivió después de su último encuentro. Gohan (abuelo) se sorprendió al ver que Goku era extraterrestre, pero después comprendió que esa era la razón por la que era tan fuerte. Al llegar al momento de la desaparición de Goku, Gohan se entristeció.

- Así que Goku ha desaparecido… Y yo que confiaba en encontrármelo tarde o temprano… 

- Si… Pero estoy aquí para algo más importante…

Gohan le explicó toda la situación actual a su abuelo. El viejo entendió la situación y empezó a enseñarle la técnica a Gohan.

Un día después, Gohan se puso en marcha para volver a la Tierra. A medida que se acercaba a la salida del Cielo un extraño mal presentimiento le crecía dentro de su cuerpo. Al llegar a la puerta vio que había millones de humanos entrando en el cielo. Entre ellos distinguió a Satán y a Dende.

- ¡Dende! ¡Satán!-gritó Gohan- ¿Qué hacéis aquí?

- Gohan.-dijo el Dios- tienes que ir a la Tierra rápido

- ¿Qué ha pasado?

- Ginyu aprovechó que no estabais para atacar la Tierra. Mató a todos-dijo Satán

- A… Todos…-dijo Gohan, maldiciendo a Ginyu- no tengo tiempo que perder. Tengo que llegar rápidamente a la Tierra

- Buena suerte.

Justo al salir del Cielo, Gohan captó dos enormes energías. Una de ellas se iba debilitando con el tiempo. De repente, Kibitoshin se teletransportó delante de él.

- Rápido-dijo Kibitoshin- a tu hermano no le queda mucho tiempo. Agárrate a mí.

- Pero necesito ir a ver a Baba para ir a la Tierra-dijo apresurándose Gohan.

- No hace falta, los Kaioshins también podemos llevar muertos al mundo de los vivos durante un día.

- Pues vamos.

Gohan se agarró al Kaioshin. Esperaba que la técnica que le había enseñado su abuelo fuese efectiva. Y si no, por lo menos confiaba en que con la ayuda de los chicos pudieran parar a Ginyu…


jueves, 20 de septiembre de 2012

Caoítulo 28: Se acerca la batalla



Trunks se desplomó al suelo. El ataque de Goten le había dado en todo su lado derecho.

-          ¿Trunks estás bien?- preguntó Pan

-          No…-dijo Trunks. Puso su mano encima del hombro. Sacó su mano. Estaba llena de sangre- Goten… Deberías tener más cuidado.

-          Lo siento

-          Con ese brazo no podré hacer la fusión. Argh, como duele.

-         Necesitamos que alguien te cure esto-dijo Goten.- Llevamos ya 363 días, mejor que salgamos y que Dende te lo arregle. 

-          De acuerdo.

Entre los 2 pudieron levantar a Trunks y sacarlo de la sala. Al salir todo el Palacio estaba desierto. Afuera había diversas señales de destrucción. La mayoría de los arboles habían caído y el Palacio tenía diversas grietas.
-          ¿Qué demonios ha pasado aquí?-Se preguntó Pan. Tenía un mal presentimiento.

-          ¡Eo! ¡Dende! ¡Gohan!- gritó Goten- ¿Hay alguien?

-          No hay nadie…-dijo Trunks.

-          Un momento… Tengo que comprobar una cosa-dijo Pan, y corrió hacia dentro. Llegó a una sala. Ahí había 6 piedras reunidas. Salió del Palació.-chicos… Creo que Ginyu ha pasado por aquí

-          ¿Cómo estas tan segura?-preguntó su tío.

-          En la sala dónde guardamos las bolas de dragón solo hay piedras. Eso quiere decir…

-          Que el enano verde ha muerto ¿no?- completó la frase una voz detrás de ellos.

-          Maldito Ginyu- dijo Trunks al ver el cuerpo de Veil.- ¿Que has hecho?

-          Simplemente le pregunté a vuestro “Dios” un par de cosas. ¿Así que estabais en esa sala? Yo que pensaba que estaba destruida. Pero, ¿y Gohan? Sólo me falta él para terminar mi venganza.

-          Quieres… decir… que…-dijo Trunks

-          Sí. He matado a todos lo que estuvieron en Namek. Tu madre incluida. Por cierto, ¿qué te ha pasado? Yo que pretendía luchar contra Gotenks. Veo que será imposible.

-          Maldito…

-          Bueno, mientras Gohan no aparezca. ¿Quién quiere luchar?-Dijo Ginyu mientras les deleitaba con su surtido de nuevas poses.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Capítulo 27: Un diablo en el cielo


- Perdone, ¿ha visto a un hombre viejo llamado Son Gohan?

- No, lo siento- dijo el alma.

- De acuerdo- dijo Gohan. Llevaban casi un día entero buscando a su abuelo, pero no lo encontraban en ningún sitio.

Él y Upa siguieron buscando. Debía haber previsto eso. El cielo era enorme y había millones de millones de almas ahí. Si no lo encontraba rápido Pan, Goten y Trunks estarían solos frente a Ginyu. Había podido derrotar a Uub. Y según Bra Ginyu había quedado malherido. Si se recuperaba su poder sería… No podía imaginarse eso. Esperaba que el entrenamiento funcionase. Y sobretodo que Ginyu no se percatase de su cola y mirase hacia arriba. Si eso ocurría…

De repente miró frente. Ahí había una montaña enorme de la que salía un aura maléfica. Son Gohan tuvo una sensación extraña que no era nueva para él. De la cueva salió una figura.

- Mira a quien tenemos aquí- dijo la figura.

- Hola-dijo con posado desafiante- Dabura.

- Veo que el pequeño Gohan se ha pasado al otro barrio. Que sorpresa. Dime, ¿a quien debo agradecer tal placer?

- No te incumbe. Además, sólo estoy aquí de paso. 

- Oh, que volverás a la Tierra. Qué pena, me hubiera gustado hablar de viejos tiempos contigo. ¿Y cómo es que estás aquí y no conservando tu cuerpo?

- Busco a alguien.

- Oh… Y dime, ¿quién es?

- Mi abuelo Gohan. ¿Pero a ti que te importa?

- Oh, que he descubierto un entretenimiento aquí arriba. Mucha gente busca a sus seres queridos que se han perdido por aquí. Y he abierto un “pequeño negocio”.

- Y a cambió que pides. ¿Qué vendan sus almas al Demonio?

- Nah, eso es muy vulgar. Lo que quiero son trabajadores. ¿Cómo te piensas que me he construido tal mansión?

- Qué mansión, yo sólo veo una montaña con una cueva.

- ¿Eso? Un simple hechizo de camuflaje. A los funcionarios no les gustaría ver eso. Quieres verla?- Dabura alcanzó la mano a Gohan. – Tranquilo, si captan que hiero a alguien me esperan diez años de tortura. Cómo si no fuera una tortura todas estas flores y alegría. 

- Ya veo- Dabura puso su mano encima de Gohan. El hechizo desapareció y en lugar de una montaña apareció una mansión enorme. 

- ¿Quieres decir que puedes decirle dónde está su abuelo?- preguntó Upa

- Exacto.

- Upa, no te fíes mucho de él…-dijo Gohan, preocupado.

- No te preocupes. Tu busca a tu abuelo y yo me quedaré aquí

- De acuerdo…

- Bien, pues todo decidido. Tú te quedas aquí. Tú ven. Te enseñaré dónde está esa persona. 

Dabura le dio una brújula encantada. Le explicó que la persona que buscaba estaba hacia esa dirección. Gohan se despidió de Upa y se dirigió hacía le dirección que le mandaba la brújula. 

Capítulo 26: Entrenamiento


Pan estaba en medio de una lucha con su tío. Ella estaba rodeada de un aura de dorada y rayos. Goten llevaba una enorme melena amarilla. Goten le lanzó rayo de Ki, que Pan esquivó fácilmente y contraatacó con un poderoso Hyperkamehameha, técnica de la cual ella y su padre estaban más orgullosos. Pan la había creado para poder competir con el SuperMakankôsappô de Uub. Goten lo esquivó por poco y contraatacó con una patada. Pan la bloqueó y empezó a pegarle con una andada de golpes. Goten los esquivaba fácilmente, pero de repente sus cabellos se volvieron negros.

-¡mier**!-dijo Goten. Pan aprovecho ese momento y le dio un puñetazo en toda la cara. Goten salió disparado y chocó contra uno de los relojes de arena. 

- Nunca podrás vencerme así, tio Goten-dijo Pan, contenta. Se acercó a su tío y le ayudó a levantarse.

- No lo entiendo- dijo Goten- soy mucho más fuerte que tú

-Sí, pero tu ssj3 solo dura cinco minutos. Sólo te tengo que aguantar durante ese tiempo. 

- Por eso siempre estarás detrás de mí-dijo una voz. Trunks había estado practicando con la espada al otro lado de la entrada de la sala- Mi ssj3 dura 15 minutos.

- Pero que dices, tú solo aguantas diez- dijo Goten, enojado.- ¿y tú de dónde sacas que solo duro cinco? Yo puedo durar el doble. Y además, Pan, tu ni siquiera alcanzas ése nivel.

- Sólo llevamos aquí siete meses, aún tengo cinco para alcanzarlo. 
Los tres entraron al comedor a comer.

- Ahora que lo pienso…-dijo Pan- ¿por qué mi padre os dio la espada?

- Él lo dijo, para que entrenásemos…-dijo Trunks

- Sí, pero, ¿porqué justo en ese momento?

- Pues para que…-dijo Goten. Empezó a hurgar en su memoria. De repente recordó la historia de cómo su padre venció a Vegeta por primera vez. Según su hermano Yajirobe fue imprescindible para vencerle…- ¡Un momento! ¿Cuándo será la siguiente luna llena?

- ¿Qué quieres decir con eso? No me digas que…-dijo Trunks

- No… Veil tiene cola…-dijo Pan, preocupada

- Exacto, tenemos que evitar que vea la luna llena o si no…-dijo Goten

- Tranquilos, cuando entramos aquí faltaban dos días para el plenilunio, cuando salgamos tendremos aún un día entero para vencer.-dijo Trunks

- ¿Y tú eso cómo lo sabes?

- Porqué ese día tengo… ehm, una cena… ehm con mi novia y… ehm yo lo preparé… ehm para hacerla a la luz de la luna-dijo Trunks, colorado.

- Eh pillin-dijo Goten, bromeando.- bueno, da igual, aunque se haga Ozaro o como se llame, le cortamos la cola y listo.

- Bueno, que hacemos aquí, tenemos que entrenar.-dijo Pan- a ver si podéis ganarme en ssj.

- Te apuesto lo que sea a que sí

martes, 11 de septiembre de 2012

Capítulo 25: En el Más Allá




-Infierno-dijo el Gran Rey Yemma, apresurándose para terminar de trabajar-cielo, cielo, infierno, cielo, cielo, infierno, infierno.

Las almas iban dirigiéndose al lugar que se les había encomendado. Cómo odiaba ése trabajo, pensó Yemma. Prácticamente se pasaba 31 horas seguidas sin descanso. Y encima tenía que aguantar las insolencias de los cretinos que no querían ir al infierno. Y ahora encima había recibido la noticia de que había un villano en la Tierra. Cómo odiaba ese planeta. Cada dos por tres aparecía alguien que le colapsaba la cola de las almas. Y luego la se volvía a colapsar a causa de que resucitasen. Cómo añoraba los viejos tiempos dónde cuando alguien se moría no volvía a vivir y luego a morir en un intervalo de siete años. Y ahora le venía alguien que en sus expedientes pone que ha muerto 4 veces.
-          Muerto cuatro veces…-dijo- tu vienes de la Tierra, ¿no?

-          Ehmmm, sí-dijo Krilin.

-          ¿No habéis pensado en dejar a todo el mundo en el cielo y dejar de molestar a los trabajadores del Otro Mundo?

-          Bueno, verás…

-          Y no hace falta ni que me moleste en juzgarte, total en cuatro días te irás de aquí

-          Eso espero, jeje.

-          A mí no me hace gracia. Sabes el trabajo que da ordenar todos los muertos? Pues imagínate eso sumando que tengo que buscar los expedientes de todo un mundo y luego volverlos a poner cómo vivos. Después tengo que ir uno a uno borrando el sello de “muerto”. Y encima tengo que hacer esto mientras todos los muertos se van quejando y amontonando.

-          Pues… Lo sentimos, lo que yo quería era ver si podría conservar el cuerpo y…

-          Y encima pides favores. Es que no os enseñan educación en ese planeta? Ay, que se le va a hacer, cumples todos los requisitos. Puedes conservar el cuerpo

-          Muchas gracias-dijo Krilin, y fue en dirección al avión que llevaba a ver a los otros luchadores
-          ¡Siguiente!

En ese momento Dende apareció junto a Gohan delante de Yemma.

-          No, otra vez de la Tierra  no…

-          Hola Gran Juez, soy Gohan, hijo de Goku y querría…

-          ¿Hijo de Goku?-dijo una voz en la cola de las almas. El alma se abrió paso entre la multitud

-          Y tu quien eres?-preguntó Gohan

-          Soy Upa-dijo- fui un amigo de tu padre.

-          ¿Upa? Es verdad, mi padre me explicó las aventuras que vivisteis. ¿Qué haces aquí?

-          Pues la verdad es que quería hablar con Goku. Hay alguien muy poderoso y malvado en la Tierra.

-          ¿Así que lo has visto? Pues tengo que darte una mala noticia, Goku…

-          ¡PODÉIS CALLAR DE UNA VEZ Y MARCHAROS DE AQUÍ!-dijo Yemma

-          Ay, perdón.-se disculpó Gohan- Lo que pasa es que me gustaría ir al Cielo y encontrarme con mi abuelo. Dentro de un par de días pediré el permiso para volver a la Tierra durante un día.

-          ¿Tu abuelo? Yo le conocí, podría decirte quien es.-dijo Upa

-          ¿Enserio? Pues…

-          ¡Basta YA! Los dos al cielo y salid de mi vista inmediatamente!

-          Muchas gracias- dijo Gohan.